Todos los años se celebran certámenes para premiar a los anuncios más creativos e innovadores, a la mejor identidad corporativa e incluso a las nuevas mentes publicitarias del momento. Pero, ¿y premiar a los peores anuncios del año? Eso es lo que hacen los Premios Sombra, una iniciativa creada por la ONG Ecologistas en Acción, los cuales recogen “las perlas de la publicidad”.

Anuncios sexistas, xenófobos, consumistas, insolidarios o cualquier anuncio que transmita este tipo de valores negativos a la sociedad pueden ser escogidos para estos premios. Ninguna marca se salva, ni siquiera Repsol, ganador del 2015 por su campaña Canarias. Una campaña gráfica que dejaba mucho que desear, siendo tachada de antiecologista por obviar los impactos ecosociales y medioambientales que podían ocasionar en la zona de Canarias.

Y es que la Publicidad es mucho más que una herramienta de difusión mediática, transmite valores, ideas y conductas que inciden en quien la ve. Por ello, hay que respetar ciertos valores y el peligro de quedar primero en estos premios es una buena persuasión para lograrlo.

Fuente

Tweet